¿Podemos obtener una enseñanza más de ests hermosas aves?
Un joven y su novia se acercaron al sacerdote de la aldea para pedirle que los casara y que los aconsejara respecto al matrimonio.Ellos querían saber el secreto para que la pareja pudiera permanecer unida durante toda la vida, como las águilas, refirieron conocer que las águilas formaban una pareja y que permanecían fieles hasta la muerte, característica poco conocida o poco mencionada de estos hermosos animales.
Pensó un poco el sacerdote y luego les hizo un encargo:
- Vayan a lo alto de la montaña, allí donde las águilas tienen sus nidos - les dijo - tú, varón, deberás capturar al águila macho cuando se acerque al nido y tú, mujer capturarás a la hembra. Ambos deberán traer las aves sin que hayan sufrido el menor daño, cuando las tengan vuelvan con ellas.
Así, los novios subieron la montaña hasta alcanzar el nido de una pareja de águilas y, siguiendo las instrucciones del sacerdote, las capturaron con las manos, sin hacerles ningún daño.Volvieron ante el sacerdote portando las enormes aves y siendo objeto de las curiosas miradas de todos con quienes se cruzaban por las calles.
Presentaron las aves y preguntaron una vez más cuál era el secreto de la fidelidad de estas aves.
El sacerdote mirándolos con una enigmática expresión les entrega un cordel y les indica atar un extremo a la pata de cada águila para así tenerlas juntas e impedir que se separen.
Un tanto extrañados los jóvenes obedecen al sacerdote y proceden a atar a los animales.
Al terminar, el sacerdote les ordena:
- Muy bien, ahora déjenlas volar.
- Muy bien, ahora déjenlas volar.
Las aves sintiéndose libres de las manos de sus captores emprenden vuelo para verse pronto en el suelo aleteando inútilmente. El cordel que las unía por las patas les impedía levantar vuelo, por más que lo intentaban, volvían a caer.
En un momento se enfurecen los animales y comienzan a agredirse el uno al otro hasta acabar dándose tremendos picotasos y hacerse daño.
Interviene entonces el sacerdote para impedir que se maltraten y se lastimen más, separa a las aves, retira las ataduras y las deja ir.
Las águilas levantan vuelo, extienden sus magníficas alas y pronto alcanzan enorme altura, se colocan una al lado de la otra en los aires y majestuosamente se alejan y se pierden en la distancia volando juntas.
- Así es una pareja - les dice a los jóvenes el sacerdote - la unión matrimonial no significa perder libertad, significa sumar la libertad de ambos, significa que cada uno respeta la libertad del otro, cada uno respeta el espacio del otro y no existe unión forzada, la unión es producto de la confluencia de dos voluntaqdes fuertes, sinceras, abiertas, eso es un matrimonio, eso es la unión de dos personas que se aman y eso es lo que hace que la unión sea para siempre.
"Si quieres saber si esa persona es para tí déjala ir, si vuelve, sabrás que siempre fue para tí; si no vuelve, es que nunca fue para tí"
